Cómo los datos están transformando el servicio integrado de agua

En nuestro webinar «Un panorama digital: las Utilities hacia la innovación empresarial del agua», hemos visto por qué los datos de consumo de agua son hoy en día el centro de la digitalización del servicio integrado de agua y qué ventajas pueden generar para los gestores, los usuarios y los reguladores. Como ha destacado Stefano Amandolesi, director sénior de Utiliteam, empresa italiana especializada en consultoría para el sector de los servicios públicos, los datos sobre el agua están experimentando una evolución crucial: de ser un elemento bruto a convertirse en una fuente de conocimiento estratégico.

En el caso italiano, regulado por la ARERA, que tiene como objetivo garantizar la eficiencia, la calidad y la transparencia, los datos —y en particular los datos de medición del consumo de agua— adquieren un papel central en la gestión inteligente del agua.

Datos, información, conocimiento: la clave para actuar de forma proactiva

En el proceso de gestión de datos en el servicio de agua, es fundamental distinguir entre:

• Datos: valor bruto, por ejemplo, «250 m³ consumidos».
• Información: datos contextualizados, como «250 m³ en un mes de un usuario en una zona con alta dispersión».
• Conocimiento: análisis de los datos en relación con los comportamientos de uso, las pérdidas de la red y las tendencias históricas.

Esta transformación permite pasar de una lógica reactiva a una lógica predictiva y proactiva, mejorando la gestión operativa y la programación de las inversiones. La medición del consumo de agua es hoy en día estratégica por tres razones principales:

• Fiabilidad de la facturación: los datos correctos y puntuales refuerzan la confianza de los usuarios y reducen las reclamaciones y los litigios;
• Informes y calidad técnica: muchos indicadores de la Autoridad italiana se basan en datos de medición (pérdidas de agua, tiempos de intervención, consumos medios);
• Planificación de las inversiones: la medición precisa permite identificar los puntos críticos de la red, optimizar los recursos y orientar las decisiones industriales.

En resumen, la calidad de los datos es hoy en día un factor habilitador para acceder a las bonificaciones tarifarias, evitar sanciones y reforzar la posición del gestor ante la autoridad nacional y los organismos competentes.

El reto: convertir los datos en motor de desarrollo

En el contexto actual, marcado por la digitalización, los objetivos medioambientales y la creciente presión regulatoria, los datos sobre el agua deben gestionarse mediante modelos innovadores. Trabajar con plataformas de medición inteligente permite integrar la recopilación, validación y uso de los datos, hacerlos trazables y transparentes, y utilizarlos para mejorar el rendimiento empresarial y la relación con el usuario.

El futuro del servicio integrado de agua depende de la capacidad de los gestores para transformar los datos de una obligación normativa en un motor de crecimiento. Quienes sepan aprovechar primero esta oportunidad obtendrán una ventaja competitiva, una mayor eficiencia operativa y una credibilidad más sólida ante los usuarios y las autoridades. No basta con recopilar datos: hay que interpretarlos y utilizarlos para construir un servicio de agua inteligente, sostenible y en sintonía con la normativa.